I. Cada día duermo con el horror de despertar.
II. Despierto, siento horror, quiero volver a dormir.
III. Duermo: sueño con el mar.
IV. Es de noche. Es real: me sumerjo, floto, ondeo.
V. El mar me traga: me pierdo.
VI. Caliente, el mar es líquido seminal.
VII. No existo: soy el mar.
VIII. No soy. Me abrazo a su cuerpo.
IX. Extraña, de su entraña me explulsa.
X. Me vomita: estoy llena de veneno.
XI. Frágil, naufrago. Vuelvo.
XII. Despierto, siento horror, quiero volver a dormir
No sufras... tengo un disfraz de ser feliz. Te lo envió por correo xpress
ResponderEliminarNos sentaremos a la noche y en la hoguera quemaremos el disfraz de bestia: de la que no siente y de la que sufre... y allí, desnudas, tal vez, empecemos a comprender como debemos comportarnos
Un beso de compañía, de los que no dejan que te sientas sola
El tiempo superpone escenas,
ResponderEliminardeja cabos sueltos,
nada sujeta.
Los amores nada dejan,
vienen y se van,
nada sobrevive.
Encajo en un diseño inútil,
soy una cifra escuálida,
masa que palpita y delira.
No hay congoja,
sólo el desvarío florido
en que sucumbo
envenenado con mi propia sustancia.
Aturdido,
preso en el devenir de la tristeza,
no encuentro el modo de ser mundano.
Un instante fugaz es el paraíso,
un orgasmo a destiempo.
Bolaños.